Intentar elegir tres platos de una comunidad autónoma que ya mide casi un tercio de toda la península es un poco reto. Si te puedes acotar a provincias, casi que mejor. En caso contrario, te hacemos nosotros la criba de platos más uno para seducir a un andaluz pero que sepas que ya, solo a base de verduras, puedes tener un recetario de 80 páginas de recetas tradicionales. El más uno te lo contamos ya, y es que la clave nos la han desvelado los propios Andy & Lucas, que tanto nos querían cuando les plantamos un chuletón con sus patatitas. El resto de platos lleva más elaboración, estáis avisados:
Salmorejo cordobés
Entre las opciones de gazpacho, ajo blanco y salmorejo como sopas frías, nos quedamos con este último. Curiosamente, no es un plato muy antiguo para la historia del país: se conocen los primeros datos de su existencia del siglo XIX. El secreto en tu caso es no pasarte con el ajo o eso puede ser una ruleta rusa en una cita. Es digestivo, si no te bebes un litro y medio —no viene el caso preguntar por qué lo sabemos, pero lo sabemos—, fresquito, sencillo y apto para todo tipo de dietas. Hacer un buen salmorejo cordobés es fácil, pero es importante que los tomates tengan gusto y estén bien maduros porque si no, por mucha maña que te des, no va a saber a nada. Y el pan duro, como en le caso de las migas, es obligatorio.
Pescaíto en todas sus variantes posibles
Las posibilidades de pescado en Andalucía son abrumadoras y estamos seguros de que con ellas puedes seducir a un andaluz y a toda tu futura familia política. Curiosamente, solo con dejar todo el peso en el pescado en sí y a poco que cocines puedes marcarte un plato delicioso. Pero como lo que tenemos en mente son espetos y no vemos claro que te lleves una barca dada la vuelta a la cocina de tu casa y hagas unas brasas, te dejamos diferentes posibilidades:
La primera, que elijas una buena materia prima, que no tiene por qué ser la más cara —por ejemplo, unas buenas sardinas— y tires de horno. No será una playa de Málaga un día de agosto pero el sabor tiene su magia y con un buen horno quedará con sus toques a brasa y todo. Otra, que abogues por un guiso como el atún de almadraba encebollado, sencillo pero con un sabor increíble. Y la última, las tortitas de camarones. Si no quieres hacer fritanga, hay otras opciones para que te queden crujientes, no te creas, te lo contamos aquí. No obstante, si la tortita de camarón está hecha como debe, no es especialmente grasa.
Piononos
Que quede claro desde ya que el objeto de esto es impresionar al otro, pero lo de llevártelo al huerto lo tienes que dejar para otro día. Un pionono es una de las cosas más buenas que vas a probar en tu vida pero también son una bomba de relojería hiperglucémica. Son naturales de Granada y hay casas de los piononos por muchas ciudades de España. Se trata de un pastelito formado de bizcocho, almíbar, yema de huevo y azúcar caramelizado. La receta tradicional, aunque tiene poco más de cien años de historia, aún guarda ingredientes secretos. Así que te puedes tirar el pisto inventándote algún ingrediente y diciendo que en realidad es una receta que conserváis es un secreto familiar que te llevarás a la tumba, como si fueras de los Kennedy en vez de llamarte Martín García.
Da igual a quién preguntes de nuestros participantes en Un País de Seductores: todos están convencidos de que los andaluces ganan por goleada a la hora de ligar, aunque el ráking está reñido. El acento, la labia, la gracia aunque no quieran que debe ser una lacra para los que no son graciosos… si bien también son una de las comunidades autónomas que más tópicos arrastran todavía. Los representantes elegidos, Andy & Lucas, no conquistan a lo británico—deben referirse a Downton Abbey—, pero tienen sus trucos, y gran parte incluyen lo de cantar, como David Bustamante. Con respecto a cómo seducir a un andaluz, lo de que se les entra por el estómago también lo tienen bastante claro. Estamos estudiando la posibilidad de incluir la opción «crujir» en el Steakmaster, Andy & Lucas.