Si tenemos que pensar en qué lugar de la casa se acumulan gran parte de nuestros recuerdos, sin duda pensamos en la cocina. Desde nuestros abuelos, en nuestro hogar la cocina es el punto neurálgico para todas las reuniones. Cuando tenemos oportunidad de crear nuestros propios espacios es una de las estancias donde más y mejor podemos plasmar nuestra personalidad, desde los colores hasta los más mínimos detalles. Pero ¿por dónde empezar para construir la cocina que queremos? ¿Es mejor para nosotros una cocina rústica o preferimos la sobriedad de líneas en las cocinas industriales? Vamos a descubrir más detalles para ayudarte a elegir la mejor opción para ti:
Cocina clásica
El estilo clásico siempre resulta reconfortante y no pasa de moda. ¿Te gustaría tener un pedazo de Downtown Abbey en casa? Esta es tu cocina. Buscamos un efecto de elegancia y sofisticación. Predominan los colores neutros y claros, como los tonos crema o los grises. Además, en estos tipos de cocina la reina es la madera (sobre todo roble, haya o cerezo materiales más ligeros). Puedes optar además por electrodomésticos con acabados de color blanco, con una amplia variedad en el mercado.
Busca muebles laqueados o laminados, con molduras decorativas e incluso patas cabriolé si es posible para detalles de mesas y sillas. Recuerda que el cristal, la porcelana o el metal cobran gran protagonismo en las cocinas clásicas. Un grifo antiguo, una vitrina para la vajilla, que haría las delicias de nuestras madres, o un bonito reloj de pared si tienes espacio suficiente, pueden ser justo el toque que necesitas para dar forma al estilo clásico. Trata de crear armonía en los colores estandarizando tonos para potenciar el efecto clásico.
Cocina industrial
El estilo industrial es una apuesta sencilla, muy personal y práctica para una cocina. Los materiales que destacan en estos tipos de cocina son el ladrillo, la madera, el hormigón, el cristal o el hierro.
Tuberías, vigas, paredes de ladrillo, muebles de acero inoxidable y mesas de madera reciclada son algunas de las claves para lograr un estilo industrial atrevido pero acogedor. Los acabados y colores son muy variados y dejan mucho espacio para dar un toque personal. Aunque los grises y tonos naturales de los materiales imperan, podemos emplear el negro como uno de los protagonistas para dar personalidad al estilo. Los electrodomésticos de este color, encastrados o no, darán una apariencia de uniformidad contemporánea que te hará sentir como en una serie ambientada en Nueva York.
Si bien lo habitual en las grandes ciudades no es disponer de una cocina muy amplia, sí que hay posibilidad de buscar este efecto a través de los muebles principales y de accesorios habituales de cocina. Los diseños modernos y angulares te ayudarán a lograr ese efecto industrial. Incluso a que tu cocina parezca visualmente más alta.
Cocina rústica
Si pensamos en cocinas rústicas con frecuencia pensamos también en una cocina acogedora, cálida y con fuerza. La naturaleza es su principal inspiración, por lo que nos centramos y mucho en el elemento madera. Buscaremos los tonos marrones originales de este material y la apariencia de madera poco tratada, donde casi distinguimos las vetas originales. También podemos pintar a nuestro gusto los muebles, buscando un efecto “retro” (hay pinturas en el mercado destinadas en exclusiva a este fin). Si tenemos ocasión, las vigas a la vista pueden ser muy valiosas para el conjunto global de la cocina, convirtiéndose en un elemento decorativo además de estructural.
La piedra también puede ser un elemento base en una cocina rústica. Muros vistos de piedra o incluso ladrillo combinado con un revestimiento de madera o azulejos como motivo decorativo refuerzan la personalidad de la cocina. Y por qué no decirlo, nos transportan a los veranos largos en el pueblo de nuestro abuelos. Los electrodomésticos con acabado de acero inoxidable o en negro mate ayudan a cerrar visualmente el estilo, en un contraste que combina perfectamente con los tonos de este tipo de cocinas.
Si preferimos una cocina más luminosa o estamos sujetos a espacios más pequeños, podemos optar por muebles de colores más claros y ayudarnos de la pintura en las paredes para añadir más luz al espacio. En los lugares de temperatura más templada o incluso cálida, el suelo de baldosa es una excelente opción que puede combinar perfectamente con este estilo.
Cocina barroca
Un estilo basado en un empleo notable de pequeños detalles y con la elegancia como señal de identidad. Si hablamos de la cocina clásica de molduras en los muebles aquí podemos dar rienda suelta a todo tipo de detalles semejantes. Pero no sólo en los propios muebles: paredes, puertas, islas accesorios… cualquier elementos es apto. Los agarradores de metal son uno de los pequeños detalles que nos ayudarán a conformar este estilo. Flores, aunque sea artificiales, papel de pared con motivos decorativos o lámparas, son otras formas de marcar el barroco.
Apostaremos por los tonos clásicos (claros o grises) para dejar espacio al color en los elementos decorativos. Y si tenemos ocasión y una campana extractora moderna para mantener la cocina limpia, podemos llevar estos detalles a tapizados de sillas, rinconeras, cortinas e incluso alfombras.
La clave de esta decoración se basa en combinar la sobriedad en los colores con la abundancia de detalles. De nuevo, los electrodomésticos de acero inoxidable encajarán con este estilo y no despojarán de protagonismo al resto de la cocina.
Cocina boho chic
El estilo boho chic es alegre, vitalista y divertido. Juega con los detalles bohemios, elegantes y sofisticados. Si decides que tus paredes han de estar pintadas, apuesta por la gama de blancos y pasteles para centrar la atención en el resto de la decoración. Pero no olvides que los azulejos o que incluso una cenefa en la pared pueden otorgar la clave definitiva para hacer que tu cocina parezca una habitación parisina de Montmatre.
También hemos de conceder espacio a los detalles: muebles en tonos vivos, cojines vibrantes, plantas, jarrones… Y estanterías no sólo para accesorios sino también para libros.
En una cocina estilo boho chic, no pueden faltar los materiales y las texturas naturales que combinen con alfombras y elementos decorativos procedentes de cualquier parte del mundo. Todo lo exótico y étnico tiene cabida en esta cocina para conformar su estética.
Cocina vintage
Las cocinas vintage aportan un encanto especial a cualquier hogar. Su objetivo es dar a la habitación un aire décadas pasadas. Las combinaciones para conseguirlas son infinitas: quizá prefieras un estilo más retro (por ejemplo, con un suelo de ajedrez) o apuestes por un aire más romántico y cálido.
Los muebles antiguos o restaurados son las joyas de este concepto de decoración. Una cocina o un frigorífico de los años 50 puede convertirse en el centro de atención. En general, en el caso de los electrodomésticos, puedes optar por colores atrevidos. Una opción más asequible para los más creativos es decorarlos a tu gusto con vinilo de colores.
Los tonos pastel, los motivos florales y los elementos de madera encajan perfectamente en este ambiente. Puedes lograr efectos vintage en los muebles de tu cocina decapando y pintando tú mismo con pinturas dedicadas a este tipo de acabado.
Arriesga, innova y acierta
Ahora te toca a ti. Elige de entre todos los tipos de cocina el estilo que más te identifique y juega con el espacio de tu hogar. Escoge la distribución que más encaje en tu casa y deja que la decoración hable por ti. ¡No tengas miedo de innovar!