Los grifos constituyen nada más y nada menos que la puerta de entrada del agua a tu casa. Pueden parecer un elemento más funcional que decorativo pero lo cierto es que han evolucionado notablemente en estos últimos años para hacernos la vida un poco más fácil junto con unos diseños cada vez más elaborados. Hay que pensar que en los conceptos de cocina abierta tan de moda, el grifo forma parte de la decoración general del comedor y posiblemente de la sala de estar. De ahí la importancia de elegir el grifo perfecto… que no siempre resulta tan sencillo. Así que por nuestra parte te ofrecemos algunas pautas para ayudarte a conseguir el grifo perfecto para tu hogar:
La importancia de la grifería en casa
Hay muchos factores que pueden influirnos a la hora de elegir un grifo. Podemos elegirlo por su estética, por una limitación funcional o porque se adaptan a las necesidades de nuestra cocina. Cualquier opción es buena si sabemos previamente lo que necesitamos y lo que nos gusta. Así que vamos a hacer una clasificación de los tipos de grifos que existen.
Los grifos de cocina pueden clasificarse de muchas maneras, pero no queremos entrar en cuestiones técnicas. Hablamos mejor de las grandes familias paras evitar liarte más.
Tipos de grifos según sus mandos
1- Col Tap o una sola agua
Tienen sólo una llave de paso. En España no es muy común, pero en otro países europeos continúan siendo de los más utilizados, y sobre todo en Asia y Oriente Medio, donde su uso es masivo.
Aquí sobre todo los vemos en espacios públicos o en los lavaderos de los hogares. Son grifos que sólo permiten un tipo de temperatura que no se puede regular. Se les conoce también como Cold Tap, porque precisamente el agua fría representa más del 95% de su uso cotidiano.
2- Bimando o en batería
Son los grifos tradicionales. Dos monturas (cerámicas o de zapata) que abren o cierran el paso del agua. Es el grifo de siempre que en España representa un tanto por ciento pequeño del mercado, pero que en el resto de Europa por ejemplo, siguen siendo usados de manera habitual, sobre todo en zonas con baja presión de agua. Son menos estéticos y eficaces que los monomandos porque se malgasta agua al mezclarla.
Una variante es lo que se conoce como Batería Americana y consta de dos mandos y un caño central. Pueden estar tanto sobre la propia encimera o a la pared. En nuestro país es muy poco habitual.
3- Monomando
Son los grifos más modernos, más eficientes y que más implantación están teniendo. En España por ejemplo, más de 3 de cada 4 grifos que se venden son monomandos. Tienen un mando en forma de maneta que acciona un cartucho cerámico por el cual pasa el agua y se regula moviendo el mando a izquierda o a derecha. Para regular el caudal de agua se mueve arriba o abajo. Un sistema que permite una mayor comodidad sin desperdiciar agua ahorrando hasta un 60% respecto a un bimando.
El mando de este tipo de grifos puede estar en el centro o en uno de los laterales dependiendo de lo que necesitemos.
4- Temporizados
Son grifos con un pulsador que regula el tiempo que puede estar saliendo el caudal de agua. Ideales para lugares públicos en los que no puede quedarse un grifo abierto. Pueden tener opción de agua fría y caliente pero lo más común es que solo tengan un tipo de agua. Su uso en el hogar es muy minoritario principalmente por cuestiones estéticas y prácticas.
5- Electrónicos
El uso es el mismo que los temporizados pero, en este caso, no existe mando. Es un sensor de infrarrojos el que detecta la presencia y lo activa, desactivándolo cuando las manos o el utensilio de cocina que se esté lavando salen de la zona. Identificados con cocinas profesionales, su uso aumenta en los hogares ya que es especialmente apto para personas con problemas de motricidad en las manos o que quieran una mayor comodidad. Pueden ser tanto de una sola agua como mezcladores.
Tipos de grifo según su caño
1- De caño alto
El caño es de gran longitud y se sitúa en vertical con una curva simple o doble. Es ideal para llenar todo tipo de ollas y pueden ser fijos o giratorios siendo ampliamente populares los segundos por su comodidad de uso. Lo más indicado en estos grifos es que no tengan ningún obstáculo ni ventanas pegados.
2- De caño abatible
Son grifos que vienen a solucionar el problema de los grifos de caño alto con las ventanas no correderas. El caño también sale en vertical pero se puede girar y ponerlo en horizontal siempre que lo necesitemos.
3- De caño bajo o recto
El caño sale prácticamente en horizontal. Es ideal para los fregaderos que no tienen ventanas cerca y para evitar las salpicaduras al máximo.
4- De ducha extraíble
Son aquellos grifos en los que en la parte final del caño hay una ducha extraíble y así puedes llegar a donde lo necesites. Es un grifo tremendamente flexible pero hay que tener en cuenta que la instalación del grifo no puede estar en la pared.
Dentro de estos modelos existen los llamados grifos profesionales o tipo pescadera que tienen las misma funciones pero una mayor utilidad.
5- De pared
Este tipo de grifos sólo pueden usarse si la instalación del grifo está en la pared. La instalación es muy parecida a la de un grifo de ducha, por ejemplo excepto, si es de una sola agua o Cold Tap que sólo necesita una entrada simple. El caño suele ser giratorio y puede quedar tanto por encima como por debajo del propio mando.
Tipos de grifo según su acabado y diseño
Aquí la cosa se complica porque las opciones son casi infinitas. Existen grifos con acabado mate, cromado, brillante, de acero inoxidable, de níquel, de bronce y casi de cualquier material que puedas imaginar. El cromo brillante representa la mayoría aplastante pero el color se hace hueco gracias a los conceptos abiertos de cocina donde el grifo es cada vez más un elemento estético como práctico.
Esto mismo sucede con el diseño. Podéis encontrar líneas de grifería clásicas, modernas, minimalistas, rústicas y de miles de estilos. El resultado dependerá de los conceptos que tengas claros a la hora de decorar tu cocina.
Recomendaciones finales
Antes de elegir tu grifo debes tener en cuenta una serie de cosas que no tienen menos importancia. La primera de ellas es su compañero de viaje. Ten en cuenta que el grifo siempre va a ir aparejado al fregadero: ten claro el fregadero que quieres.
Analiza tus necesidades porque de ello dependerá el grifo que más te convenga. Comprueba si tienes ventanas cerca, si puedes poner otro grifo en otra zona, si es mejor colocar el mando a la izquierda o a la derecha, que no toque al abrir con la pared, qué uso vas a darle, cuanto tiempo pasas en la cocina, esas cosas son vitales para tu elección.
Mide, mide siempre. No compres un grifo sin conocer sus dimensiones.
Elegir un grifo es una tarea en la que la funcionalidad y el diseño van de la mano. Una buena elección puede serte muy útil y puede ser la guinda perfecta a tu cocina.
Hazte la vida más fácil, hazte la vida más bonita.