Sabemos que somos unos privilegiados en nuestros hogares. Actualmente, contamos con todas las comodidades imaginables, como electrodomésticos que hacen que cada una de las tareas sea mucho más fácil. Eso sí, también emiten ruido. La suma de todos puede ser algo molesto y, en algunos casos, el que sean silenciosos es muy importante. Un lavavajillas silencioso tiene muchas ventajas, vamos a ver cuáles.
El problema de los decibelios
Todos tenemos claro que el ruido en los hogares puede ser un problema. Identificamos muy bien los ruidos molestos en casa de los vecinos pero en el nuestro es más difícil. Sin embargo, también existen.
No solemos tener en cuenta las emisiones de ruido pero, para hacernos una idea general, la erupción de un volcán llega a 180 decibelios y, por encima de estos decibelios, el ruido puede provocar la muerte.
A partir de 80 decibelios, el ruido es dañino para nuestra salud en exposiciones prolongadas. Es el equivalente a un tren pasando. Por debajo de este nivel no se considera peligroso pero, hasta los 40 decibelios es molesto. No es dañino para nuestra salud pero puede incidir negativamente en ella.
Un electrodoméstico normal suele estar entre los 50 y los 60 decibelios de emisión en su funcionamiento mientras que los lavavajillas silenciosos emiten unos 40 decibelios que es el equivalente al ruido que podemos encontrar en una biblioteca.
Si bien una emisión normal no es mucho y los 50 decibelios pueden equivaler a una conversación normal, la suma de todos esos decibelios puede provocar un efecto parecido al de un bar, donde la suma de conversaciones crea un ruido molesto.
¿Cómo funcionan los motores silenciosos?
Los motores tradicionales incluyen escobillas de grafito, su función principal es ejercer presión sobre los anillos rotatorios y que, de esta manera se pueda transmitir la energía necesaria para mover el motor.
El sistema es eficaz pero el principal problema que tienen las escobillas es que generan una fricción y, con ella, se genera un ruido. Este ruido puede ser mayor o menor dependiendo del estado del motor y de su antigüedad.
Los motores más modernos permiten regular la energía del motor y pueden prescindir de las escobillas y, de esta manera, pueden reducir el ruido que hace el motor.
La inclusión de estos motores en los electrodomésticos nos permite tener frigoríficos que apenas se oyen, lavadoras que no hacen ruido y, en el caso que nos ocupa, lavavajillas silenciosos.
Ya sabemos cómo funcionan estos motores, ahora vamos a ver cómo pueden ayudarnos en nuestro día a día.
Ventajas de un lavavajillas silencioso
La sostenibilidad es un valor imprescindible en estos días y las emisiones de sonido son un factor a tener en cuenta a la hora de construir lo más parecido a una passive house®: una casa que reduzca al mínimo el impacto medioambiental.
Casi tan importante como apostar por la eficiencia energética es apostar por la emisión de ruido de nuestros electrodomésticos así que, una de las muchas ventajas de los lavavajillas silenciosos es que reducen al mínimo la huella en el medioambiente.
Otra de las ventajas es nuestro descanso. Apostar por electrodomésticos silenciosos es apostar por nuestra calma, un lavavajillas sin emisiones de ruido nos sólo nos permite lavar los platos de un modo cómodo y rápido, también nos permite hacerlo en paz.
Además de eso, los electrodomésticos silenciosos suelen ser modelos modernos por lo que garantizan su rendimiento, su durabilidad y su eficacia. La tecnología que los hace silenciosos facilita también que consuman menos recursos y que, por ello, tengan una vida útil mucho más larga.
Con este tipo de motores se consigue optimizar el consumo y reducir el ruido, de modo que la eficiencia energética y el silencio van de la mano en motores que colaboran con nuestro consumo y también con nuestro descanso.
En resumen: muchas ventajas y muchos menos problemas. Una inversión rentable e inteligente.
¿Qué opciones tengo si quiero un lavavajillas silencioso?
Actualmente existen modelos silenciosos para todas las opciones. Si necesitas una gran capacidad porque tienes una familia numerosa puedes encontrar modelos de 15 cubiertos con emisiones de unos 40 decibelios.
Si, por el contrario, quieres ahorrar espacio y no necesitas lavar muchos platos puedes optar por modelos compactos de 45 cm que tienen también muy pocas emisiones de ruido. Además de las pocas emisiones, puedes sumar el resto de ventajas que tienen los lavavajillas compactos.
En resumen, puedes tener el lavavajillas que tu hogar necesite sumándole además todas las ventajas de un lavavajillas silencioso. Máxima comodidad, mayor eficiencia y cero ruidos.
La comodidad y el descanso deberían ser una prioridad a la hora de elegir tus electrodomésticos y eso implica no sólo dejar la vajilla reluciente con el mínimo esfuerzo y la mayor eficacia, sino también con el menor impacto para tu salud y el medioambiente.
Los lavavajillas silenciosos consiguen precisamente eso, máxima eficiencia con muy pocas emisiones sonoras para que tu descanso no se vea comprometido.