Manualidades con niños en la cocina

29 abril, 2020

La cocina es un mundo lleno de posibilidades para los más pequeños. Convertirles en pequeños chefs o simplemente dejar que te ayuden en la cocina haciéndoles partícipes del proceso de las recetas estimula positivamente su crecimiento y hace que compartáis un valioso tiempo juntos. Pero hay muchas manualidades con niños en la cocina que puedes llevar a cabo para algo más que la hora de comer.

Fabrica tu propia plastilina

Uno de los elementos más divertidos para jugar en familia. Si estos días te han pillado en casa con escasez de plastilina, como si de levadura se tratara, o simplemente la que tienes no vive sus mejores tiempos, esta es una solución divertida para tener a mano.

manos de niño jugando con plastilina hecha con levadura

Necesitamos 2 tazas de harina normal (no nos vamos a poner exquisitos), 1 y 1/2 de agua, 1 taza de sal, 24 gr de aceite de oliva (o dos cucharadas soperas). Mezclamos y amasamos bien hasta que todo esté bien integrado. Una vez que tengas una bola grande, puedes subdividir la masa en tantas bolas como quieras. Añade un poco de colorante alimentario a las bolas para tener tu plastilina de colores.

Puedes conservarlo en recipientes herméticos. Al no llevar conservante, no dura mucho tiempo para nuestro experimento, pero a cambio podéis guardar las pequeñas obras de arte que hagáis horneando las piezas finales.

Experimentos de ciencias

Manualidades con niños en la cocina pero también experimentos que llevar a cabo con ingredientes que podéis encontrar en la despensa o en cualquier supermercado. Divertidas y fáciles de hacer en cualquier momento para descubrir, crear y jugar.

Nuestra lámpara de lava

Un experimento perfecto para que los más pequeños vean las reacciones químicas y se queden absortos en las burbujas. Necesitas 1 tarro o una botella de plástico, tipo refresco, pastillas efervescentes (vale cualquiera, desde aspirina a las de la dentadura), aceite (el corporal también es válido), colorante alimenticio del color que quieras y agua.

Llenamos con agua un cuarto de la botella y el resto con aceite. Reitramos posibles etiquetas para ver bien el interior. Cuando ambos queden separados (un buen momento para hablar a los niños y adultos de las densidades), añadimos el colorante que queramos, basta con un poco, como veremos. Introducimos una pastilla entera o a cachitos y ya podéis sentaros a ver el espectáculo.

Pintando obras de arte en leche

Otro experimento que aprovecha las diferentes densidades de los componentes para crear toda una obra de arte sobre la marcha. Sólo necesitarás 1 plato hondo, leche, colorantes alimentarios, bastoncillos de los oídos o similar y jabón lavaplatos.

manos de niño haciendo pintura de colores con leche en tarros de cristal

Vierte leche (mejor entera) en el plato. Añade algunas gotas de diferentes colorantes alimentarios, en el centro o por diferentes partes del plato, podéis ir probando varias veces. Moja el bastoncillo de los oídos con un poco de lavaplatos y acércalo a la leche. El contacto hará que se creen diferentes figuras con las que podéis jugar y aprender sobre los colores, mezclas y tonos. Y en pleno movimiento.

Huevos de goma

Un clásico básico para los niños procedente de otra reacción química, esta vez, de la superficie de calcio (carbonato) en la cáscara del huevo y el ácido del vinagre.

Sólo necesitarás 1 huevo, 1 tarro con tapa y vinagre. Introduce el huevo en el tarro y llena el recipiente de vinagre hasta arriba, tapándolo. Espera de 24 a 48 horas y saca el huevo. Cómo podréis ver, la superficie se ha vuelto mucho más elástica y hasta puede rebotar (¡cuidado! No es una pelota, puedes rebotarlo en una superficie plana como una encimera pero no en el suelo). Si lo observas a la luz verás que puedes ver su interior.

niños disfrazados de conejo pintando huevos de pascua en la cocina

Si quieres, podemos dar un poco más de juego a nuestro huevo volviéndolo a introducir en el tarro, añadiendo agua hasta arriba y colorante. Al día siguiente verás cómo el huevo a absorbido el colorante y tenemos un huevo teñido del color que queramos. Si lo abrimos, sin embargo, veremos que la yema sigue intacta, gracias a la membrana protectora.

El papel seco en el agua

Un experimento para hacer en la cocina o en el baño que siempre sorprende a los más pequeños. O a los no tan pequeños incluso. Hazte con 1 trozo de papel (puede ser un tissue, una hoja pequeña de papel de cuaderno arrugado…), 1 vaso y 1 bol con agua.

Introduce el papel, arrugándolo bien y colocándolo en el fondo del vaso de manera que no se caiga si le damos la vuelta. Llena el bol calculando que, si sumergimos el vaso, el agua lo va a tapar. Y sólo nos queda proceder al baño. Introducimos el vaso boca abajo lentamente en el bol de agua y lo mantenemos unos 20 segundos. Sacamos el vaso y veremos que el papel…¡continúa seco! Y es que al aire también ocupa su espacio.

Las otras manualidades con niños en la cocina

niños con gorro de cocinero haciendo galletas

Nos gusta recordaros que los niños pueden empezar a participar en la preparación de los menús y la comida desde muy pequeños. Tareas sencillas y la elección de qué comer y los porqués les familiarizarán con la nutrición y la convivencia en familia en el día a día. Y nunca se sabe, quizá descubras a pequeños chefs. Pero ante todo, seguro que cumples el objetivo de que se diviertan y paséis más tiempo juntos.

Cocinar, dentro de sus posibilidades, les abre un mundo nuevo para experimentar y para disfrutar de su tiempo contigo. Además de alimentar su imaginación y creatividad con las recetas y de desarrollar sus habilidades en motricidad manipulando diferentes alimentos.

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