Pasar la barrera de Semana Santa significa que ya empieza el buen tiempo. Eso también es sinónimo de las ganas de que nos dé el aire y de calzarnos las gafas de sol para disfrutar del calorcito solos o en compañía. Todo esto, inevitablemente, suena a temporada de barbacoa. Sabemos que un piso con balcón es más habitual que un patio propio donde montarte una barbacoa. Así que vamos a darte algunas ideas para que puedas disfrutar del sabor de una barbacoa en un piso y de la comida al grill sin que te echen a la calle en la próxima junta de vecinos.
Barbacoas de interior (como lo lees)
Sí, existen. Porque, visto lo visto, en estos tiempos tenemos que estar preparados para todo ¡y cómo iba a faltar una opción de montar una barbacoa! Las barbacoas para interior se montan dentro de la cocina, aunque su portabilidad te permite colocarlas donde quieras. Eso sí, dentro de cada, deberías situarlas debajo de una buena campana por razones que ya te imaginas, pero el resultado vale la pena. Las de carbón no pueden usar con cualquier tipo de carbón, necesitan uno más o menos específico. Suelen estar preparadas para dar de comer a 3-5 personas, que ya está bien. Naturalmente, también hay barbacoas eléctricas.
Una buena opción para montar una barbacoa en un piso es comprarla de un solo uso, bastante populares en los países del norte. Para cantidades pequeñas de comida, funcionan bien. Lo que sí te recomendamos es tener en cuenta a tus vecinos. Si vives en un primero, no te tires dos horas de barbacoa o te pongas a asar sardinas. Ser cívico no significa renunciar a montar una fiesta en casa, pero hay que hacerlo con dos dedos de frente. Si puedes avisarles el día anterior de tus planes, con amabilidad, es un gesto que seguramente agradecerán.
Preparar barbacoa sin una barbacoa
El sabor de la barbacoa es especial, estamos de acuerdo. Aunque también puedes encontrar ese sabor de parrilla con otras opciones. Un grill portátil te permite hacer prácticamente cualquier plato, desde perritos a hamburguesas, tacos o verduras. Te lo puedes llevar al balcón o dejarlo en la cocina, pero el resultado seguirán siendo platos diferentes y muy ricardos, con un olor y un sabor inconfundibles.
Al tratarse de una forma de cocinado rápido y fácilmente controlable, puedes estar más pendiente de la fiesta y de pasártelo bien, que perpetuamente ubicado en la cocina. Además, un grill es generalmente muy fácil de limpiar, algo que vas a agradecer al final del día.
Nos gustaría recordar que en un grill se pueden hacer muchas cosas y no todas llevan carne. Así que en principio esto no debería ser un problema. Si te faltan ideas de platos vegetarianos o veganos, no te preocupes que a nosotros nos sobran.
¿Y si no tenemos grill?
Puedes perfectamente usar una plancha. No requiere recetas elaboradas ni mucha preparación, pero seguirá siendo una opción de menú estupenda y atractiva de no- barbacoa en un piso. Si tienes plancha tipo Teppanyaki, te vas a hacer el rey de las reuniones de amigos yendo un paso más allá en plan gastro-pro. Por otro lado, una buena sartén de hierro fundido también te puede hacer el apaño.
Aprovechar el horno al máximo
Dependiendo de las funciones del horno, el resultado de tu menú puede tener poco que envidiar a una barbacoa. Algunos hornos cuentan con una parrilla preparada para este tipo de funciones. Pero la cuestión es que, si no te encajan las otras alternativas y no ves lo de montar el grill portátil en el balcón, el horno es una opción saludable y perfecta para hacer algo diferente ¡o incluso fritos sin liarla en la cocina!
Otros detalles para disfrutar de una barbacoa en un piso
Cabe pensar que la parte más importante de una barbacoa es la comida. Pero la verdad es que la ceremonia en sí tiene mucho peso. Trata de hacer algo especial, estés solo o con otra gente. Puedes hacer fiestas temáticas, gastarte un poco más en la bebida esta vez, decorar el balcón o el salón de una forma diferente… lo que viene a ser una quedada pero al mediodía, en vez de por la noche.
Intenta organizar todo con cierto tiempo todo y de planificar para ahorrarte prisas y disgustos. Además, como siempre que montes una comida, pide ayuda si la necesitas.
Recuerda: una no-barbacoa se compone de platos generalmente sencillos pero con mucho sabor. Puedes apoyarte en salsas y otros complementos para potenciar los platos. No te compliques en exceso, porque tú también tienes que disfrutar de la celebración. Trata de relajarte y no vivir una tensión perpetua por si se te queman los chorizos en el grill.
Como siempre, lo que cuenta es estar con gente que quieres, o disfrutar de unos momentos en soledad dándote un pequeño homenaje al sol (con protección solar, siempre con protección solar, somos pro-barbacoas pero precavidos). Porque el espíritu de un barbacoa, en un piso o en una finca al aire libre, es el mismo: disfrutar de la vida.