10 errores habituales en tus cenas de Navidad y cómo solucionarlos

10 diciembre, 2021

El ajetreo y el estrés de Navidad son tan clásicos navideños como poner el Belén y el árbol. Pero siempre se puede aspirar a tener al menos comidas y cenas familiares tranquilas. Como no te podemos ayudar a eliminar conversaciones incómodas en la mesa, del palo de “se te está pasando el arroz”, o peleas por ver en qué cadena de televisión se ven las uvas, sí que queremos aportar nuestro granito de arena a la hora de montar el menú navideño. Porque una Navidad de película de tarde con pavo al horno es posible, aquí te dejamos soluciones para esos errores habituales en tus cenas de Navidad y, como bonus track, ideas de recetas libres de drama para tu menú navideño. Mejorad eso, Reyes Magos (mic drop).

1. Complicarse la vida

Problema: Todos queremos hacer una comida o una cena de Navidad de ensueño, de las de anuncio de turrones. Queremos una mesa espectacular donde haya quince platos a elegir con un pavo asado en medio, decoración hasta con candelabros, que nuestros suegros nos feliciten por lo bueno que está todo… pero claro, la realidad golpea con fuerza. ¿Cómo intentar no amargarte y disfrutar de tu menú de Navidad?

tendecias-decoración-navidad

Solución: no autoboicotees tu menú navideño por querer hacer algo espectacular. Es habitual que sucedan estos errores en las cenas de Navidad o en grandes ocasiones. No trates de elaborar un plato completamente nuevo la mañana de Nochebuena. Muchas veces, lo que hace especial un menú de Navidad es volver a comer un plato que solo consumes una vez al año. Si el cuerpo te pide algo distinto, prueba a hacer un entrante nuevo, que no te quitará mucho tiempo y no será una tragedia griega si no sale bien. O incorpora un plato que ya hayas cocinado varias veces a lo largo del año y tengas controlado.

2. Conocer y preparar el espacio para cocinar

Problema: tienes que preparar el cordero y no encuentras la fuente del horno que solo usas en Navidad. Queda una hora para que lleguen todos y las copas de vino buenas están en el trastero llenas de polvo. No tienes ni cinco platos hondos que sean iguales. No tienes ni un solo cuchillo que corte. Todo mal.

horno abierto y persona introduciendo un pastel de hojaldre para navidad

Solución: pla-ni-fi-ca para ahorrarte disgustos. Prepara en la medida de lo posible lo que necesitas para cocinar y para que pongáis la mesa. Ten a mano y limpio el menaje de cocina y la vajilla. Si no vas a cocinar en tu cocina, no te compliques con los platos. Un horno que no conoces mucho te la puede liar en un día demasiado especial como para correr riesgos. Hay que intentar minimizar las situaciones difíciles.

3. El innecesario gran festín

Problema: te has liado a preparar recetas, llevas dos días cocinando y organizando platos. Tienes comida para alimentar a toda España, Portugal y las islas. Te faltan bandejas en el horno para todo lo que hay que preparar. Tú estás exhausto de cocinar y la gente tan llena que apenas prueba el plato principal que has estado cocinando cuatro horas.

menú navidad recetas ideas

Solución: simplifica. Los invitados van a comer más tranquilos y a disfrutar más de los platos si son pocos pero bien hechos. Ni qué decir tiene que los anfitriones, también. Opta por hacer algunos entrantes fríos, no más de cuatro, con alguno caliente, y un plato principal. O por servir un menú como tal con entrante, primer plato, principal y postre, en raciones moderadas. Nadie espera ni va a disfrutar diez platos puestos en la mesa, es más, alguno lo mismo se abruma y todo.

4. La mitad de las cosas se quedan en el frigorífico

Problema: una consecuencia directa de lo anterior y uno de los clásicos errores de cenas de Navidad. Recogemos la mesa y nos damos cuenta de que nos hemos olvidado bandejas enteras de comida dentro del frigorífico. Incluyendo ese postre que has estado dos horas preparando o ese foie que solo se fabrica en una aldea gala irreductible dos meses al año.

vasitos de cristal con mousse de chocolate echado con una cuchara

Solución: cuando abarcamos mucho, es fácil que haya platos que olvidemos sacar. Preparamos tantas cosas y hay tanto de lo que estar pendiente que olvidamos qué teníamos previsto. Planea los días previos qué vas a hacer de comida y reduce el número de platos a servir. Dispón en la encimera lo que haya que colocar en la mesa de Navidad.

5. Todo a última hora

Problema: de los errores más típicos en cenas y comidas de Navidad. Como en tu cabeza lo tienes clarísimo, dejas todo para el último momento. Llega Navidad y ahora las gambas a la plancha están a precio de caviar ruso y no hay uvas para Nochevieja ni en la gasolinera. O extremo contrario, el 15 de noviembre ya empiezas a agobiarte por las comidas, los regalos, las visitas o si el roscón va a ser relleno o mondo lirondo.

mujer escribiendo en un cuaderno con adornos de navidad

Solución: papel y lápiz. De nuevo, planifica todo lo que puedas. Eso incluye hacer una lista de la compra. Ponte alarmas para sacar los langostinos del congelador a tiempo. Repasa bien cuántos sois a comer, cantidades y posibles menús. Si puedes dejar algún plato preparado el día anterior, hazlo, ni lo dudes. Organiza cuándo ir a comprar para evitar aglomeraciones y tener que ir el mismo día 24 de diciembre: la gente de cara al público también merece tener Navidad.

6. S.O.S

Problema: estás hasta arriba y no llegas a hacer la mitad de las cosas. No sabes qué preparar, no sabes ni siquiera si tienes sillas suficientes para diez personas, y ya no llegas a comprar la bebida. Te has tomado ocho tilas pero te pueden los nervios.

personas brindando con copas de vino en navidad

Solución: pide ayuda. Es más, tus invitados, familia o amigos, estarán encantados de poder hacer algo para ayudar. Se sentirán menos incómodos y seguramente les apetezca contribuir. El ir “a mesa puesta” no siempre es agradable, especialmente si por eso ven que estás cansado o enfadado por haber tenido que trabajar tanto para ellos. Deja que lleven entrantes, queso, su última receta vegana, o que se encarguen de la bebida. Reparte el trabajo como en cualquier comida juntos.

7. Liarla muchísimo en la cocina

Problema: todo estupendo, comida buenísima, te sacan a hombros de la cocina. Pero se va todo el mundo, llega la hora de la verdad y parece que ha pasado un tornado y una plaga la langostas por la cocina. Torres de cacerolas y platos sucios. Comienzas a sollozar.

chuletas cordero navidad

Solución: típico de los errores de cenas de Navidad y de cualquier comida en general. Para esta ocasión y para todas, intenta ir recogiendo según vas cocinando. Y, naturalmente, pide ayuda. Tanto si tienes lavavajillas como, especialmente, si no lo tienes, que alguien sea tu asistente de cocina para que la limpieza no se convierta en un quebradero de cabeza más.

8. Descuidar la bebida

Problema: con tanto trajín, te has quedado corto con la bebida o te acabará sobrando como si fueras a dar una fiesta universitaria. La única opción no alcohólica es agua del grifo.

cómo conservar vino

Solución: haz un pequeño sondeo entre tus invitados sobre sus preferencias. Ten en cuenta tu menú —verdura, carne, marisco— a la hora de elegir las bebidas. Por supuesto, no te olvides de la gente que no consume alcohol y ten alguna opción prevista. Es buena idea pedir a los invitados que traigan ellos la bebida y así pueden contribuir y tú olvidarte de esa parte. Y por último, si alguien vuelve conduciendo a casa, que no abuse del alcohol en ningún caso.

9. Preparar la mesa

Problema: soñabas con una mesa de Navidad a lo The Crown y te das cuenta de que cada tenedor es de su padre y de su madre o peor, no tienes bastantes. El mantel que utilizas para ocasiones especiales tiene tantos lamparones que parece de una caseta de la Feria de Abril.

mesa decorada para navidad con plano close de un plato con una servilleta roja

Solución: no descuides el escenario donde vas a poner tus platos, la mesa, vaya. Chequea los días previos que todo lo que quieres usar está disponible y limpio. Puedes hacer algún adorno de Navidad o centro de mesa casero. Si optas por comprar algo desechable, intenta que sea material orgánico o fácilmente reciclable. Huye de los plásticos. Y si vas muy corto de tiempo o no te apetece, pues tampoco pasa nada.

10. Los imprevistos

Problema: los invitados llegan tarde. Falta comida o bebida. No te has acordado de que hay un alérgico a los frutos secos y tres veganos y tu plato principal es pollo al horno con salsa de nueces.

Solución: uno puede poner toda su intención y atención e incluso así, es imposible controlar todo. Es fácil que se escape algo, tanto a anfitriones como a invitados. Si alguien llega tarde, deja la comida en el horno al mínimo. Y si se enfría, pues mira, que hubieran llegado antes. Si a alguien no le gusta el menú, siempre nos quedarán opciones veganas o un par de huevos fritos con patatas.

aperitivos navidad

Esperamos haberte arrojado un poco de luz en ese túnel que a veces son las comidas y cenas de Navidad. Y dejamos para el final eso que ya sabes pero hay que tener presente: lo importante en Navidad, especialmente este año que podemos volver a juntarnos, es disfrutar de la familia, los amigos y darnos cariño, que falta nos hace y no podemos darlo por sentado. Un cariño que muchas veces viene directamente del horno en forma de tus mejores recetas. O de las regulares, pero igualmente hechas con amor.

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